Para la semana 30 de su embarazo, puede experimentar los siguientes síntomas:
- fatiga o dificultad para dormir
- dolor de espalda
- cambios en el tamaño o la estructura de sus pies
- cambios de humor
Dolor de espalda
El dolor de espalda es una dolencia común durante el embarazo y su aumento de peso adicional. Con aproximadamente 10 semanas de embarazo, te alegrará saber que hay una serie de cosas que pueden ayudarte.
En primer lugar, consulte con su médico para asegurarse de que está ganando una cantidad adecuada de peso. Aumentar demasiado de peso no solo agrega más riesgos a su embarazo, sino que también puede aumentar su dolor de espalda. Por otro lado, ganar muy poco puede ser un problema.
A continuación, enfócate en tu postura. Si te resulta difícil pararte o sentarte erguido con el vientre sobre ti, es posible que quieras buscar un cinturón de soporte para el embarazo. Si trabaja en un escritorio, asegúrese de que su silla, teclado y monitor de computadora estén configurados para crear un entorno ergonómico.
Elevar los pies también puede aliviar cualquier problema de espalda. Si todavía llevas tacones altos antes del embarazo, considera cambiar a zapatos planos que ofrezcan apoyo. El calzado de apoyo puede ayudar a aliviar el dolor de espalda. Pero no te preocupes. Su calzado lindo todavía lo estará esperando después de que llegue su bebé.
Recuérdese que todo valdrá la pena al final, y si el dolor lo está molestando, hable con su médico sobre posibles remedios o pídale un masaje a su pareja. Un masaje también es una excelente manera de conectarse con su pareja.
Cambios en los pies
No estás imaginando cosas si crees que tus pies están cambiando. Algunas mujeres suben la talla de calzado completa durante el embarazo. La investigación muestra que el embarazo puede afectar tanto el tamaño como la estructura del pie. Si bien es probable que la hinchazón por retención de líquidos disminuya después del parto, el embarazo puede alterar permanentemente el arco del pie.
Si no es posible caminar de 9 a 5 años con zapatillas suaves y tolerantes, este puede ser el momento de invertir en un par de zapatos nuevos que se ajusten cómodamente durante el resto de su embarazo.
Cambios de humor
Si su segundo trimestre le dio un poco de alivio de los altibajos emocionales, es perfectamente normal comenzar a experimentar más cambios de humor en su tercer trimestre. Tienes muchas cosas en la cabeza, y eso junto con tu mayor agotamiento puede poner tus nervios de punta.
Si las ansiedades del embarazo o la próxima maternidad te mantienen despierta la mayoría de las noches o interfieren con tus actividades o relaciones diarias, debes consultar con tu médico. No es raro que las mujeres experimenten depresión durante o después del embarazo. Su médico puede ayudarlo a controlarlo.