Historia del Día Nacional del Niño Intermedio
Los niños intermedios tienen la reputación de ser ignorados por su familia, por lo que crecen resentidos, retraídos y desafectos. Aunque la investigación muestra poca correlación entre el orden de nacimiento y la personalidad, el estereotipo ha persistido en personajes de la cultura pop como Jan Brady, que personifica al niño medio amargado.
De hecho, los niños del medio pueden tener algunas ventajas distintivas en la vida adulta. Las habilidades que desarrollan como hermano «olvidado» a menudo se traducen en cualidades importantes como empatía, diplomacia y flexibilidad. De hecho, más de la mitad de los presidentes estadounidenses eran hijos intermedios, junto con muchos otros líderes exitosos.
Los niños intermedios, ingeniosos e independientes, pero también cooperativos y pacientes, a menudo crecen para ser buenos líderes y compañeros de equipo útiles. Pueden negociar una variedad de personalidades, pero también lo hacen bien por su cuenta, y son conocidos como tomadores de riesgos y pensadores independientes. Debido a que con frecuencia se los deja a su suerte, los niños del medio desarrollan una autosuficiencia menos común en sus hermanos mayores y menores.
Hasta la década de 1970, las familias estadounidenses tenían un promedio de 2,5 hijos. Hoy en día, debido a la modernización y las presiones económicas y ambientales, cada vez menos familias tienen hijos intermedios, y la familia estadounidense promedio tiene poco menos de dos hijos.
El Día Nacional del Niño Medio comenzó en 1986 como una forma de celebrar a los hermanos que se sienten excluidos o invisibles y darles un día especial propio. Hasta ahora, se ha celebrado el 12 de agosto.
No todos están de acuerdo en la fecha de la festividad: la Unión Internacional de Niños Intermedios, fundada por Bruce Hopman, quiere cambiar el Día Nacional del Niño Intermedio al 2 de julio, que cae exactamente a mitad del año calendario.