La mielopatía degenerativa (DM) es una enfermedad progresiva de la médula espinal en perros mayores. La enfermedad tiene un inicio insidioso típicamente entre los 8 y los 14 años de edad. Comienza con una pérdida de coordinación (ataxia) en las extremidades posteriores. El perro afectado se tambaleará al caminar, se arrodillará o arrastrará los pies. Esto puede ocurrir primero en una extremidad posterior y luego afectar a la otra. A medida que la enfermedad progresa, las extremidades se debilitan y el perro comienza a doblarse y tiene dificultad para mantenerse de pie. La debilidad empeora progresivamente hasta que el perro no puede caminar. El curso clínico puede variar de 6 meses a 1 año antes de que los perros se parapléjicos. Si los signos progresan durante un período de tiempo más largo, puede ocurrir pérdida de continencia urinaria y fecal y, finalmente, se desarrollará debilidad en las extremidades delanteras. Otra característica clave de la DM es que no es una enfermedad dolorosa. Aunque cualquier perro puede ser probado para DM, es posible que el fondo genético que predomina en algunas razas impida el desarrollo de síntomas incluso en perros que se prueban afectados (en riesgo). En este momento, la evidencia requerida de asociación entre la mutación genética y las evaluaciones reales de la médula espinal solo se ha demostrado en las razas enumeradas.
Consulte http://www.ofa.org/dnatesting/dmexplanation.htmly http://www.caninegeneticdiseases.net/DM/ancmntDM.htm para obtener información adicional sobre el diagnóstico de DM.