La psicología forense es una rama de la psicología que se relaciona con la ley. La parte principal de la psicología forense es trabajar con el sistema de justicia penal.
La psicología forense es el uso de prácticas y principios psicológicos y su aplicación al sistema jurídico, principalmente en los tribunales. En 1893 James McKeen Cattell de la Universidad de Columbia fue el primero en investigar y estudiar la psicología del testimonio.
El Consejo de Representantes de la Asociación Americana de Psicología en 2001 reconoció la psicología Forense como una especialidad. Una definición amplia de psicología forense incluye dos partes. La primera parte es investigar el comportamiento humano que está y/o puede estar relacionado con el proceso legal. El segundo es el uso de la práctica psicológica para consultar sobre el sistema jurídico y dentro de él, incluido el derecho penal y civil.
La parte pública del tiempo de un psicólogo forense se pasa en una sala de audiencias trabajando como testigo para la corte. Responde a preguntas basadas en entrevistas y conversaciones con personas sospechosas de haber cometido un delito. Un aspecto del psicólogo forense es dar pruebas de la capacidad del sospechoso para ser juzgado. Otro es sus pensamientos sobre el estado mental del acusado en el momento de la ofensa. En el momento de dictar sentencia, un psicólogo forense puede dar pruebas de circunstancias atenuantes derivadas de la condición del acusado en ese momento.