La cara que presentamos al mundo está cambiando constantemente a medida que diferentes combinaciones de sus 42 músculos se contraen y se contorsionan. Los seres humanos pueden producir miles de expresiones faciales distintas, incluidos 19 tipos diferentes de sonrisa, según una investigación del psicólogo estadounidense Paul Ekman. Sin embargo, solo una de ellas es una sonrisa «genuina» o de Duchenne.
Descubierta por el anatomista francés Duchenne de Boulogne en 1862, la diferencia clave entre esta sonrisa feliz «real» y una sonrisa feliz «falsa» radica en los orbicularis oculi, músculos que envuelven los ojos. Toda sonrisa implica la contracción de los músculos principales cigomáticos, que levanta las comisuras de la boca. Pero La sonrisa se caracteriza por el exceso de contracción del músculo orbicular, estrujar la piel alrededor de los ojos en patas de gallo.
El hallazgo de Duchenne se pasó por alto en gran medida en ese momento, pero Ekman demostró que tenía razón, y nombró a la sonrisa de puro placer en su honor. Desde entonces, la reputación de la sonrisa Duchenne ha crecido. Un estudio, por ejemplo, observó fotos de jugadores de béisbol profesionales de la década de 1950 y encontró que los smilers de Duchenne tenían un 70 por ciento de probabilidades de vivir hasta los 80 años, en comparación con el 50 por ciento de los no smilers. Los investigadores lo atribuyen a los beneficios para la salud asociados con la felicidad. Ekman, mientras tanto, descubrió que una sonrisa de Duchenne, pero no otras sonrisas, está acompañada de actividad en la corteza frontal izquierda del cerebro, una región involucrada en experimentar placer.
Sin embargo, hallazgos más recientes pintan la sonrisa de Duchenne con una luz diferente. Primero, está el descubrimiento de que, contrariamente a la creencia popular, se puede falsificar. No todo el mundo es capaz de hacer esto, pero una minoría sustancial de personas puede hacerlo. Lo que es más, un enorme meta-análisis de la investigación de las expresiones faciales revela que la mayoría de las veces las personas que son genuinamente felices no sonríen en absoluto. Otro estudio encontró que los jugadores de bolos de diez pines tendían a no sonreír cuando anotaban un strike, solo cuando se volteaban para mirar a otros jugadores de bolos.
Todo esto encaja con una nueva idea que desafía toda la idea de para qué sirven las expresiones faciales. Algunos psicólogos creen que no son guías confiables para nuestras emociones en absoluto, sino herramientas que usamos para manipular a los demás. En este punto de vista, una sonrisa no es genuina o falsa, en absoluto. En cambio, es una señal para indicar que deseamos colaborar o vincularnos con alguien.